Flores para Maria
Dia 5.
Querida Madre hoy con alegría te ofrezco HORTENSIAS regálame tu TERNURA.
Mirar la sonrisa de María es contemplar y recibir la ternura de Dios.
La ternura de la Mater te permite centrar toda tu atención únicamente en Dios. Es Ella, la que te ayuda a abrir el corazón para darle un «sí» sin condiciones a su Hijo y experimentar con todas sus dimensiones el consuelo que da la fe.
¡Gracias, María, ¡por ser la ternura de Dios en mi corazón!
Hoy regalaré sonrisas contagiando la ternura de María.
Madre,
consérvame con un corazón de niño, puro y cristalino como una fuente,
dame un corazón sencillo que no saboree tristezas.
Un corazón grande para entregarse,
tierno en la compasión,
un corazón fiel y generoso,
que no olvide ningún bien
ni guarde rencor por ningún mal.
Amén.
Crédito: Rama De Señoras Slp Schoenstatt
